viernes, 13 de marzo de 2009

El amor y la benignidad de Dios

El amor de Dios hacia la humanidad lo vemos mostrado en el hecho de que habiéndo nacido todos pecadores, EL nos dió como "propiciaciòn o ayuda" a Su Hijo Jesús para que al morir en la cruz por nuestros pecados, éstos nos fueran perdonados. Pablo nos lo explica en el libro de Romanos en el capítulo 5 y versos 8 y 9.

Allí, Pablo nos hace ver en palabras muy simples que el amor de Dios se muestra en que como pecadores y habiendo sido enemigos de Dios por ello, EL nos quiso proveer una salvación en Jesús; pero qué, conociendo la naturaleza humana no esperaba que al día siguiente de aceptar esa provisión, nosotros dejáramos de ser lo que habíamos sido hasta ese día.

Luego termina diciendo que por esa misma razón nuestra perfección o sea lo que se conoce como "santidad o santificación", venga con el tiempo, venga con la humillación que nos pudieran dar las pruebas, las penas, la escacez, las limitaciones, las enfermdades, etc. Y es allí en donde conocemos su benignidad, pues el es bueno para perdonarnos vez tras vez nuestros intentos por agradarlo.