jueves, 2 de abril de 2009

Dios es un refugio no una cueva.

En el idioma español mencionar algo es como mencionar otra debido a la riqueza de sus palabras, usted puede decir cueva y piensa en un refugio o decir refugio y piensa en una cueva. Bueno, pues resulta que en el idioma hebreo no es así. Cuando usted dice refugio está hablando de la palabra "MAIN" que significa casa, hogar, un lugar de resguardo. Pero cuando dice cueva está hablando de la palabra "KJUR" que significa básicamente madriguera, un lugar en donde usted no mora sino se "esconde". Y, ¿A qué viene todo esto? Bueno, le explico.

Muchas personas a través de los siglos han tomado el Reino de Dios, la Casa de Dios y la Palabra de Dios como una cueva y no como un refugio. Han utilizado el "esconderse en Dios" como una forma de vida, mientras que lo que Dios desea es que "EL sea nuestra vida". Más claro no lo pueden mostrar las escrituras, en una cueva se esconden los ladrones, vea Mateo 21:13; es una guarida de serpientes, vea Isaías 11:8; allí se ponía a los muertos en la antiguedad, vea Juan 11:38; el mismo David encontró en la Cueva de Adulam a los que ciertamente eran afligidos pero que estaban amargados, vea 1era. de Samuel 22:1.

El Salmo 90:1 nos habla de que Dios es un refugio si "moramos con EL y en EL", pero no si lo tomamos como una excusa o un pretexto para esconder nuestras frustraciones, o esconder nuestro fracaso en la vida, o peor aún, para vivir de EL esperando que El nos supla todo lo que necesitamos sin trabajar. La palabra refugio aparece 56 veces en la escritura y en todas nos habla de morar en Dios o confiar en Dios, mientras que la palabra cueva aparece solamente 36 pero en la mayoría hablando de aspectos o características negativas de los que allí están, como ya mencionamos. Busquemos a Dios por lo que ES no por lo que nos pueda DAR, eso es refugiarse en EL y no esconderse en EL.