lunes, 22 de junio de 2009

Porque ese es el anhelo ardiente de la creación.

Todo núcleo familiar necesita un líder... para eso Dios puso a un padre de familia; toda empresa necesita un líder... para ella existen los gerentes y los presidentes de las grandes corporaciones; de la misma forma la iglesia del tiempo del fin, que es el tiempo que ya estamos viviendo, necesitará y pronto, líderes... para ello el Señor planeó desde antes de la creación del hombre, un grupo de personas que serán los faros de la humanidad en los últimos tiempos. En el plan de Dios, ese grupo de personas o líderes será muy pero muy especial, por el hecho de que serán quienes lleven en sus hombros a todo creyente durante la época más grave, más difícil, y más tormentosa que haya habido desde que el hombre fuera puesto sobre la faz de la tierra (vea Mateo 24:21, tiempo llamado por Jesús mismo: El tiempo de la Gran Tribulación).

Dice Pablo en el libro de Romanos que: "El anhelo ardiente de la creación es aguardar la manifestación de los hijos de Dios". La pregunta es ¿Y no todos somos hijos de Dios, desde el momento en que aceptamos el sacrificio de la cruz de Jesús?. Sí. El punto aquí es que lo que Dios nos dice en el idioma original es lo siguiente: " Que la "expectación" de la "institución" (entiéndase aquí el término por iglesia de Dios), es "esperar totalmente" la "revelación" de los "Hijos maduros de Dios" (ver el original de Romanos 8:19 en griego). Estos son los líderes que nos llevarán hasta el final de esos años de Gran Tribulación.

Ahora bien, las características de éstos "Hijos Maduros de Dios" no son para que califique cualquiera, veamos: 1) Tienen que ser "elegidos" por Dios, no es que se puedan hacer méritos para calificar (vea Mateo 10:1-4); 2) Tienen que ser de "condición humilde", para que estén conscientes de que tienen que tener una dependencia absoluta de Dios (lo vemos en los 12 apóstoles y en la elección de los díaconos en Hechos); 3) Tienen que creer y haber experimentado el "sufrimiento", el mismo Juan lo explica en Apocalipsis 1:9; 4) Según dice Pablo en Romanos y el mismo Juan en Apocalipsis, lo que reciben no lo reciben por conocimiento sino por "revelación", pues precisamente esa es la palabra utilizada por Dios para "manifestación", ser revelado. El conocimiento da sabiduría, pero la revelación da poder, y eso, Dios únicamente lo hace con sus "esclavos" vea Apocalipsis 1:1 la palabra "doulos"; 5) Tienen que ser gente que viva "apartada" del mundo, no precisamente enclaustrada en una montaña o en un monasterio, sino lejos de los placeres de la carne, vea Romanos 8:5 lo que dice: Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero ocuparse de los asuntos del espíritu es vida". 6) No puede ser gente que vivió en otra época y vaya a resucitar, tiene que ser gente que viva ésta generación, en ésta dispensación, pues es uno de los privilegios que otorga cada época, de la misma forma que es imposible que uno de nosotros pueda subir físicamente al arca de Noé, ese fue su privilegio. El mejor ejemplo de esto lo vemos con el profeta Elías y los 7,000 reservados para Jehová.